GBN. La Guardia Civil ha realizado tres nuevas operaciones contra el cultivo ilegal de marihuana en Cenes de la Vega, Belicena y Otura, en las que se han intervenido 1.127 plantas, y cuatro personas han sido puestas a disposición judicial como presuntos autores de un delito contra la salud pública por cultivo de droga y de un delito de defraudación de fluido eléctrico.
La primera operación tuvo lugar en el municipio de Otura, después de que los agentes averiguaran que en una vivienda de una urbanización de esa localidad existía un cultivo intensivo. Allí, un hombre de 48 años había habilitado un invernadero en el garaje y estaba cultivando 387 plantas.
En Belicena la Guardia Civil averiguó que una pareja, él de 44 años y ella de 48, había habilitado el semisótano de la vivienda para poder cultivar cannabis de manera intensiva. En el registro los agentes descubrieron 460 plantas y una conexión ilegal a la red eléctrica.
Plantas en el sótano
En Cenes de la Vega, la Guardia Civil ha descubierto una vivienda donde el propietario, de 37 años, estaba cultivando 280 plantas en el sótano.
En estas tres operaciones la Guardia Civil ha contado con la colaboración de los operarios de Endesa para el descubrimiento y desmantelamiento posterior de las conexiones ilegales a la red.
Por otra parte, la Guardia Civil ha descubierto una pequeña plantación de cannabis sativa en una vivienda y se ha incautado de doce plantas al sobrevolar con el helicóptero las distintas localidades del Valle de Lecrín, en una operación que tenía como finalidad localizar este tipo de plantaciones de exterior.
En esta actuación contra el cultivo ilegal de cannabis sativa se ha investigado al propietario de la vivienda donde crecían las plantas, de 60 años, como presunto autor de un delito contra la salud pública por cultivo de droga.