La guerra de Ucrania dispara la búsqueda de talento experto en nuevas tecnologías energéticas como el hidrógeno verde, según Catenon

/COMUNICAE/

Se trata de nuevas tecnologías y fuentes de generación y por ello de un mercado de talento altamente restringido, ya que no hay profesionales suficientemente cualificados y especializados para dar respuesta a los proyectos en marcha. La demanda de expertos pone foco en dos áreas, los centros de investigación y profesionales altamente cualificados del sector gasístico. Un talento necesario para que el Hidrógeno Verde sea viable y competitivo

La carrera del Hidrógeno Verde está en marcha, pero faltan profesionales, según la consultora Catenon. Se trata de una tecnología nueva y de un mercado de talento altamente restringido, ya que no hay expertos suficientes para dar respuesta a los proyectos innovadores que empiezan a debatirse y por ello, se están buscando en sectores «afines».

La Guerra de Ucrania ha disparado el interés por el impulso de esta nueva fuente renovable de energía, al poner de manifiesto la dependencia gasística de Europa con Rusia y el sobrecoste que esta ocasionando. Así, hoy en día la Unión Europea depende de Rusia para cerca del 40% de su gas natural. Además, una parte significativa de las importaciones de petróleo de la UE en 2021 provenían de Rusia.

«Esta situación- señala Ana Campos, Directora de Energía y Utilities de Catenon– ha puesto de manifiesto planes de aceleración en temas de hidrógeno verde aunque a largo plazo. Las grandes compañías energéticas de Europa y por supuesto las españolas, trabajan en proyectos iniciales en este campo, ya que son por un lado una solución medioambiental importante y por otro, un gran desafío para no tener depender de los grandes productores de gas como Rusia y contribuir de manera notable a la descarbonización. El Hidrógeno Verde es sin lugar a duda un elemento clave, ya que libera energía sin emitir gases contaminantes, pero a su vez supone un gran desafió estructural.»

Un talento altamente escaso
El sol y el viento, que dan la energía fotovoltaica y eólica renovable, necesaria para la producción del hidrógeno verde, los avances técnicos locales, y su capacidad de distribución, sitúan a España en primera línea de salida en esta carrera. «El problema es que el talento es escaso, al tratarse de una tecnología totalmente nueva dentro del sector. De ahí, que se busque en expertos de distribución de gas y profesionales capaces de cerrar alianzas altamente sofisticadas y de futuro, así como con relaciones para formalizar consorcios con inversiones conjuntas», señala Campos.

El objetivo es que el hidrógeno verde sea una energía renovable alternativa de alto valor en 2050. Su producción es cara y el desconocimiento es grande, pero nadie duda que será una gran fuente de energía en el futuro. «El hidrógeno nos rodea, pero su transformación requiere mucha energía y ésta debe provenir de fuentes 100% de origen renovable». También necesita ser transportado y por el momento, se estudia el uso de las redes gasísticas en España, que pueden ser vitales en su impulso, facilitando su suministro, inicialmente, a grandes consumidores.

No se conoce el comportamiento energético del hidrógeno verde en un 100 % pero las grandes empresas empiezan a trabajar en el tema. El objetivo es desarrollar iniciativas que permitan su distribución, comercialización y garanticen la seguridad en su transporte y utilización.

La demanda de talento pone foco en dos áreas, los centros de investigación y profesionales altamente cualificados del sector gasístico. «Un talento necesario para que el Hidrógeno Verde sea viable y competitivo. Se busca hibridar proyectos a hidrógeno verde y para ello se necesitan profesionales altamente cualificados y expertos en la materia», señala Campos.

La ruta del hidrógeno verde de la Unión Europea
De acuerdo con la hoja de ruta del Hidrógeno Verde, en 2030 se asistirá a las primeras operaciones comerciales y en 2050 será una industria energética plena. La Unión Europea   contempla el Hidrógeno Verde en el Plan de REPower de cara al 2025-2030 para acabar con la dependencia de Rusia antes de 2027 y así adaptar con rapidez la industria y las infraestructuras a diferentes fuentes y proveedores de energía. En España, según el PNIEC (Plan Nacional Integrado de Energía y Clima) se ha establecido un marco inicial que señala cuáles son los GW que tienen que aportar las renovables y el porcentaje que corresponde al Hidrógeno Verde.

Según el PNIEC, la modernización hacia una economía descarbonizada movilizará unos 236.000 millones de euros entre 2021 y 2030. El 80% de estas inversiones se realizarán por parte del sector privado. El 20% restante, unos 47.000 millones, serán inversiones de las distintas administraciones públicas (nacional, autonómicas, locales y comunitaria), que actuarán como palanca de la importante financiación privada y que se centrarán, fundamentalmente, en ayudas al ahorro y la eficiencia energética -en especial, a la rehabilitación energética de viviendas- y en actuaciones asociadas a la movilidad sostenible.

Estas iniciativas, según el PNIEC generarán entre 250.000 y 364.000 nuevos empleos, un aumento del 1,7% en 2030. Las inversiones en energías renovables serán el principal motor de generación de empleo: entre 102.000 y 182.000 nuevos puestos netos año. Le siguen las acciones vinculadas al ahorro y la eficiencia energética, especialmente la rehabilitación, que generarán entre 42.000 y 80.000 nuevos empleos año. Por sectores, el mayor crecimiento se producirá en el comercio y reparación (52.700 empleos en 2030); seguido de la industria manufacturera (52.000 empleos en 2030) y la construcción (41.700 empleos en 2030).

Fuente Comunicae