Redacción. La delegada territorial de Empleo, Formación y Trabajo Autónomo y de Economía,Conocimiento, Empresas y Universidad, Virginia Fernández, ha señalado que tras el fin del estado de alarma el pasado 21 de junio, «el Servicio Andaluz de Empleo (SAE) ha continuado la prestación de servicios con normalidad, recuperando poco a poco la gestión presencial de algunas actuaciones y teniendo en cuenta las restricciones derivadas de la crisis sanitaria por Covid-19 que aún persiste».
Durante una visita a la oficina SAE Centro de la capital, la delegada de Empleo ha tenido oportunidad de comprobar los medios y recursos necesarios que se han aplicado en ella y en las otras 21 oficinas de la provincia, «para garantizar que trabajadores y ciudadanía cuenten con las medidas necesarias cuando se estén realizando las gestiones, si bien el protocolo de actuación continua siendo de atención con cita previa».
Actualmente, el número de trabajadores que ha recuperado la presencialidad en su puesto de trabajo asciende a 298 (incluyendo funcionarios, laborales y personal propio) y 88 trabajadores desempeña aún su función de forma telemática.
Entre los servicios recuperados, destaca la gestión de cita previa para atención telefónica por parte de las oficinas de empleo. Así, y desde el fin del estado de alarma, el SAE ha gestionado hasta el pasado 4 de agosto en la provincia un total de 35.430 citas previas, solicitadas principalmente a través de la web (49%). Una vez solicitada la cita, son estos últimos y por cada oficina quienes llaman a la persona usuaria el día y la hora seleccionadas para que pueda realizar las gestiones necesarias en relación a su demanda de empleo u ofertas, que no pueden ejecutarse online, como pueden ser la modificación de domicilio que implique cambio de la oficina asignada, la aportación documental justificada para cambios sobre su demanda de empleo o cualquier cuestión que el ciudadano precise y no pueda realizar a través de la webd o la app. En los casos necesarios, la atención es presencial previa cita en la propia oficina de empleo.
Asimismo, y con el fin de garantizar el cobro de las prestaciones por desempleo generadas tanto por los ERTE aplicados durante este periodo como por otras causas recocidas por el Servicio Público Estatal de Empleo, el SAE continúa renovando automáticamente las demandas de empleo de las personas inscritas como demandantes, evitando que caigan en baja y que ello pueda ocasionarles algún perjuicio. Desde el 21 de junio y hasta el 31 de julio se registraron 87.191 renovaciones en el sistema.
Por último, se continúa facilitando la reinscripción telemática de la demanda al mantenerse la flexibilización de los requisitos para ello, lo que ha permitido la reinscripción telemática de 22.273 demandas desde que finalizó el estado de alarma. En lo que se refiere a la gestión de ofertas, en el periodo comprendido entre el 21 de junio y el 31 de julio, se registraron 138 ofertas de empleo para 526 puestos de trabajo.
Medios materiales
Para la apertura de las oficinas, se ha reforzado el control de vigilancia de entrada y acceso de personas con la contratación centralizada por la vía de urgencia de este servicio en aquellas oficinas que no disponían del mismo. Esta vigilancia se ha incrementado en las oficinas de Zaidín, Iznalloz y Motril.
Respeto al suministro de hidrogeles, se han proporcionado dispensadores de 250ml para cada cuatro mesas; uno en cada una de las zonas de reprografía, y se han colocado dispensadores fijos en cada una de las oficinas para su uso por parte del público, lo que ha supuesto un coste de 3.680 euros. Igualmente, se ha instalado la cartelería y señalización preceptiva con un coste de 849 euros. Todo ello de conformidad con el plan de contingencia y continuidad en crisis Covid-19 elaborado para las oficinas del SAE.
Igualmente, se han instalado 377 mamparas protectoras en las distintas oficinas con un coste de 7.354 euros y se han adquirido webs cam para las unidades de orientación por valor de 2.593 euros. También se han distribuido papeleras específicas para recoger material higiénico-sanitario (mascarillas) por un coste de 2.097 euros.